Saturno es el séptimo planeta que nos encontramos en el orden astrológico. Cuando llegamos a Saturno llegamos a los límites de lo visible, de lo personal. En el Universo ocurre igual.
Saturno es el último planeta que podemos observar bajo un cielo estrellado y sin contaminación lumínica. Después de él se encuentra el cinturón de asteroides para pasar a encontrarnos con Urano y los demás planetas transpersonales.
Saturno tiene una órbita de 29 años, la conocida en astrología como «retorno de Saturno», el cual es tan temido por los aficionados de la astrología.
Tiene una velocidad diaria de 03’49» y pasa en un signo zodiacal entre 2 años y medio y 3 años. Tiene un diámetro de 120.000 km y cuenta con un sistema de anillos bastante llamativo que siempre ha fascinado al hombre.
Tiene períodos de retrogradación que se mueven en 4 meses o 5 cada año, esto ocurre en tramos intermitentes.
Significado del símbolo astrológico de Saturno
El símbolo astrológico de Saturno se compone de una cruz sobre un semicírculo que mira hacia abajo. Se simboliza aquí la materia y lo terrenal por la cruz y la mente concreta en el semicírculo hacia abajo.
Vemos con ello como a través de Saturno podemos concretar nuestras ideas y espiritualidad a través de la vida terrenal que pesa más que todo lo demás.
Saturno en la Mitología
En la mitología griega toma el nombre de Cronos, siendo el mismo nombre el del planeta y el dios, en la mitología romana. Se conoce en la historia mitológica cómo Saturno o Cronos, castró a su padre Urano quitándole así gran poder.
Más tarde devoró a cada uno de sus hijos, hasta que llegó Júpiter y en su lugar le dió una piedra derrotándolo y así postulándose como el rey de los dioses.
A Saturno se le veía siempre acompañado en las pinturas por un reloj de arena, simbolizando así al paso del tiempo. Por ello es el arquetipo del dios del tiempo, el tiempo pasa y lo engulle todo, implacablemente.
También se le pintaba con una hoz en la mano, que una vez más alude al paso del tiempo en el cuerpo físico tomando su fin en la muerte. Y a el se le plasmaba como un viejo con cara de avaro.
Saturno es el dios del karma, nos muestra que toda acción tiene su recompensa y que sólo con el trabajo, la paciencia y el tiempo se pueden recoger los frutos de la cosecha.
Características astrológicas de Saturno
Saturno es un planeta masculino, pasivo y frío-seco. Allí donde tenemos a Saturno en nuestra carta astral, vemos donde la vida nos impondrá tener más orden, más responsabilidad, más estructura y más límites.
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Saturno es un planeta que en astrología nnos limita, pero para que aprendamos a ser responsables. Es el llamado «gran maestro» y la verdad es que el nombre se lo ha ganado a pulso.
Sino que se lo pregunten a los que han pasado ya por el primer retorno de Saturno o la primera oposición que hace a la Luna natal. Tránsitos que sin duda no dejan indiferentes a nadie.
Saturno nos habla en nuestra carta natal de dónde es el área en donde buscamos más estabilidad. Allí donde más perseverantes debemos de ser. La casa en la que se encuentra nos mostrará aquello que conseguiremos darle estabilidad tan sólo con el paso del tiempo.
El signo nos habla de las facilidades para manifestar esa perseverancia que tenemos, de qué manera la buscamos. A través de Saturno vivimos la energía que nos incita a querer tener el control en la parte de nuestra vida que nos marca nuestro rádix.
Cuando encontramos en una carta a Saturno dominante y con buenos aspectos, nos podemos encontrar a personas pacientes, responsables y que tienden a ser reservados con su vida.
Por el contrario, cuando encontramos a Saturno en una carta natal siendo dominante y encontrándose dañado por aspectos o aflicciones, podemos observar que esa persona tendrá tintes pesimsitas, fríos, desconfiados o tristes.
Asociaciones de Saturno
Saturno es el planeta regente de Capricornio, antiguo regente de Acuario también. Tiene afinidad con las casas 8 y la casa 1, por el orden caldeo. Rige a las herencias y al fin de la estructura, que aquí podemos llamarle «cuerpo físico».
A Saturno se le asocia con lo sólido y lo que es tangible a la larga, es todo aquello que es material y estable. El el principio energético de la materialización, aunque también lo es de la lentitud.
Nos dice que la materia se consolida a la larga y con paciencia. Cuando hablamos de experiencia, hablamos de Saturno. Esto quiere decir que la vejez también entra en el ámbito de experiencia.
Saturno es la rutina, la soledad, la rigidez, el peso del día a día, el control, la responsabilidad, el deber, la estructura, la reflexión, el método a seguir y el orden, también nos habla del ahorro para los tiempos malos de «vacas flacas».
Se le asocia con los abuelos, también con las enfermedades que atrofian y las crónicas. Rige a los huesos, la piel, los dientes, el cabello y las articulaciones.
En las profesiones nos encontramos con que los agricultores son los que trabajan con un ambiente saturnino al 100%. También los que trabajan en los museos, los arquitectos, constructores y albañiles.